lunes, 27 de enero de 2014

“Y Ju$ticia para Todo$…”




Temprano en la mañana acostumbro a leer el periódico de fácil acceso pero de poca confianza para enterarme de lo que ha ocurrido mientras descanso y recargo energías. Cuando leo las noticias de portada, que por cierto ninguna es de cosas positivas, noto que de un tema de moda los periodistas hacen su agosto sin darse cuenta que esto desvirtúa la realidad de un pueblo. De las seis o siete noticias principales, cinco están relacionadas con la noticia de portada, como si fuera una revista. Algo que me provoca espanto, pero de todas las portadas una me impactó de sobremanera. Claro está los medios querían vender y así lo hicieron. Esa noticia todos saben cual fue y hablaremos de ella ahora.

Caso del ahora convicto Pablo Casellas. Ocurre en el año 2012, una fianza al acusado de $4,000,000 que prestó su padre con garantía de devolución, un juicio de alrededor de 15 días y una decisión de 11-1 para un veredicto final de culpabilidad. Uff! Eso sí fue un caso. Pero vamos al asunto en realidad. Este señor fue encontrado culpable por el asesinato de su esposa con todas las evidencias para arrestarlo al momento.  Esto no ocurrió. El derecho constitucional lo cobija, aunque nadie tiene derecho a quitarle la vida a otro ser humano, pero vamos esto es justicia.

Nuestro personaje Saulo, así le llamaremos al convicto, era un corredor de seguros, también de Mercedes, pistolas, de negros y de cuentos de hadas,  creó varias versiones de los eventos ese día los cuales todos eran casi imposibles de creer. Aun así  la justicia lo declaró inocente hasta que se le pruebe lo contrario. Claro,  es importante reconocer el detalle que su padre Salvador es juez en la Corte Federal. Esto podría provocar un a$unto muy grande en nuestra ju$ticia. Así que el ministerio público decidió darle la oportunidad. Por supuesto, él es de la nueva realeza.

Cuando se le iba a celebrar el primer juicio, Saulo formó un berrinche de niño que hasta se vomitó encima, acto que le tratarían hasta en el hospital, que hasta en estado comatoso  le diagnosticaron. Pero no funcionó; aunque a decir verdad sí, pues si lo comparamos con un ser como tú y como yo, sabrás que hace rato estuviéramos en la cárcel aunque la fianza sea de medio millón. Luego de ese espectáculo comenzó todo el calvario para Saulo. Su Salvador confiando en la ju$ticia hablaba de la inocencia de su hijo menor. ¿Crees que este Salvador no sabía del pecado de Saulo? Bueno esto se puede analizar más adelante.

 Con una batería de cuatro abogados, Saulo fue directo al tribunal de su ciudad vecina para que le celebraran un juicio ju$to. La fiscalía con 31 testigos y la defensa con uno solamente dieron pie a una primera sospecha de culpabilidad. No creo que  la defensa con un solo testigo para  Saulo pudiera crear alguna duda razonable. Con los informes de balística de los peritos, todos los que fueron al estrado y un Saulo sonriente y tranquilo que durante los recesos comía galletas, provocaba en el jurado abrir la celda y tirar la llave al  Yunque. Lo cierto es que fue declarado culpable, cambiando la forma de pensar de su Salvador y el semblante de Saulo ya no era el mismo.

Muy bien vestido y esposado se llevarían al hombre que nos hizo esperar casi 10 horas para un veredicto que todos sabíamos era culpable. La prensa no pudo transmitir en vivo el momento del veredicto, el país no pudo disfrutar de eso, aunque suene un poco cruel y morboso, pero te apuesto que querías ver su cara al momento en que el alguacil le quitó todas las pertenencias y le dijo: “acompáñeme”. Solo vimos las imágenes de este pobre individuo salir por la parte trasera  del tribunal y escuchar a sus abogados decir que apelaran. Claro sabemos que su $alvador debe estar detrás te todo esto.

Para su suerte y lo digo de forma sarcástica, Saulo después de salir del piso 7 entraría en una cárcel de máxima de nombre 705 a comenzar su condena. Allí lo esperaban como siempre ocurre, los médicos, sus medicinas, un cuarto, perdón una celda con aire que acaban de arreglar luego de estar dos años sin reparar y un tv para que no se pierda los muñequitos mientras aguarda por lo menos 7 días para que se le dicte sentencia y lo extraditen a los Estados Unidos a una cárcel por allá para que no le hagan mal a este Saulo que se convertirá  en Pablo. Y entonces podemos decir se hizo ju$ticia. Igual que a todos los pobres del país cuando cometen un crimen y pagan su fianza. El juicio tarda una semana en celebrarse, el aire de la celda se daña, el tv no tiene antena y el agua caliente se acabó. Si dudas solo tienes que ver las noticias y evaluar cuantos convictos se les da seguimiento después de su condena. Este Casellas tuvo primera plana casi una semana entera y aún hoy sigue en los periódicos.


No me atrevería a decir que la ju$ticia de este país tiene un símbolo de dólar en el medio,  pero lamentablemente “el que nace bien parado no tiene que invertir salud” (Silvio Rodríguez). Sabemos que los ojos del país y la esperanza de confiar en el sistema judicial estaban en juego. El veredicto tenía que ser de culpabilidad así las personas confiarían en este sistema que está hecho para ser corrompido con jugadas de ajedrez y estrategias de medias verdades. Espero que Saulo disfrute su estadía y que pueda cumplir con sus 118 años llenos de salud y paz mental. Que consiga un nuevo amor y que sea feliz para siempre. Lo único que sé es que las Paredes hablan y en su nuevo hogar tiene tres y una reja.

sábado, 25 de enero de 2014

Comunicación Silenciosa



No hace mucho vi una película muy interesante relacionada a las redes sociales. Quizás parezca un tema repetido en nuestro diario vivir pero aun así ignoramos la importancia del mismo. Para hacer el cuento corto, la película trataba de cómo estos sitios sociales en la web afectan en nuestra vida de forma negativa y más cuando estamos totalmente atados a ellos. Esto me creó mucha  preocupación pues estamos viviendo en una época donde el hablar y el comunicarse ya es algo silencioso.

Creemos que estar en una red social, las cuales no mencionaré pues ustedes las conocen, nos hace un  bien a nuestra sociedad. Pero el objetivo de estas redes ya se ha perdido. Queremos estar en todas y claro nosotros los puertorriqueños no fallamos en esto. Somos parte del mundo globalizado pero; ¿qué pasa cuando esto ya es enfermizo? ¿Qué pasa cuando nos afecta en lo personal, en el trabajo y con la familia?
Es triste ver las personas caminando como “zombies” con sus teléfonos “inteligentes” viviendo la vida de todos y de nadie. Invitar a una persona a cenar se ha convertido en una tertulia silenciosa. El móvil se ha convertido en parte de los utensilios necesarios que están en la mesa. Si charlamos, quizás la conversación dure  algunos cinco minutos, pues no pasa mucho cuando ya miramos  para saber que escribieron en la red y claro sólo dejaste de mirar unos cinco minutos y  notaste  que por lo menos dos de cada cinco personas que conoces han “posteado” el mismo estado o el mismo “meme”. Cuando acaba la cena apenas se sabe que hablaron y se ha perdido todo el sentido de lo que fue una cena íntima y en buena compañía.

Si hablamos de lo que pudiera esconder cada conversación estaríamos un día entero comentando. De hecho miles de personas se esconden para expresar lo que sienten y  que no pueden decir en persona. Parece bueno pero no lo es. El socializar de tú a tú es necesario para el ser humano. Somos seres de sociedad y necesitamos hablar, comunicarnos de forma correcta. Las charlas por teléfono impiden un poco pues cuando sentimos algo profundo lo hacemos notar con la voz, pero en un escrito es un poco difícil y peor aun cuando utilizamos solo símbolos, letras y pegatinas (stickers). Es triste que muchas relaciones amorosas culminen por medio de estos mensajes, y peor aun cuando hablas con alguien que realmente no existe. Esto suele ocurrir mucho con los adolescentes. Estos jóvenes apenas saben con quién se comunican y la verdad es que un papel o un escrito aguanta todo lo que puedas escribir. Al final resulta una gran sorpresa.

En las familias ya no existe esa comunicación. Cada quien vive su mundo cibernético a su forma. Salimos de paseo y no falla ese sonido del móvil anunciando que alguien escribe. Tampoco falta ese anuncio en la red que dice: “compartiendo en familia y olvidándome de todo”, frase que considero un poco contradictoria pues le estás diciendo a todos lo que NO forman parte de tu familia, que los estás olvidando mientras paseas y tienes tiempo con la familia y no te das cuenta que lo pierdes escribiendo un estatus que a nadie le interesa. Peor aun cuando se habla del “quality time” con los hijos. De que rayos hablan si llevas metido en la red casi cuatro horas. ¿Dónde está esa calidad de vida para los hijos? Luego no te puedes quejar si ellos cuando crezcan no puedan hablar en confianza contigo.

Nuestros muchachos ya se están afectando. En las escuelas por ejemplo, los estudiantes andan en grupo pero ninguno se habla. Todos están en las redes sociales “comunicándose” con otras personas fuera del círculo de amistades. En muchos casos, extraños que ni papá ni mamá conocen y menos ellos mismos como ya habíamos mencionado antes. Y ni hablar de la forma en que escriben o se expresan. Si este blog se escribiera de esta forma :/ <3 :-D ¿crees sería fácil de entender? Las carcajadas silenciosas serían de esta forma: LOL LFMO, JAJAJAJA… algo difícil de apreciar. De hecho ya hasta los teléfonos inteligentes permiten ese tipo de símbolos para facilitar la vida, pero en la vida laboral estas tonterías y disparates no son bien aceptadas. Si dudan, intenten en la universidad hacer una carita feliz al lado de su nombre, un corazoncito en donde debería  ir un acento y una bolita encima de la letra “i”.

En la película que comentaba al principio, tiene escenas las cuales se tratan de los personajes escribiendo en la red social. Esta es la parte en la que decidí ir al baño. ¡Caramba, qué parte aburrida! Esto sucede a diario. Silencio total en nuestras vidas. Olvidamos quienes están a nuestro alrededor, lo cambiamos por un grupo de personas que a veces ni conocemos en persona, pero le llamamos “amigo”. Este silencio del que mencionamos pueden destruir relaciones tanto personales como de pareja y sin descartar las familiares. Preferimos compartir nuestra vida personal e íntima con todos antes que con los que realmente te quieren y aprecian.


Abogo por las tertulias, por la comunicación hablada con un buen café. Creo en las cenas de familia donde se discuten temas interesantes, hablamos sobre nuestro día, aprendemos de las anécdotas de los mayores, conocemos por lo que pasan nuestros hijos y un sinfín de cosas que ocurren en este momento el cual acostumbro a llamarlo sagrado. No rechazo las redes sociales, estas llegaron para quedarse pero debemos estar conscientes del daño que nos está haciendo a diario y cuan perjudicial será para el futuro, no el nuestro, sino el de nuestros hijos. Meditemos en esto.